Desde "Closing Time" hasta escribir con Adele y Carole King, Wilson explica las pequeñas estrategias que ha aprendido para convertir los obstáculos musicales en grandes canciones.
Durante décadas, Dan Wilson ha sido una gran ayuda y toda una referencia para otros autores y cantautores. Como artista en solitario, como coautor de canciones de Adele, Taylor Swift o John Legend, o incluso como miembro de grupos de rock alternativo como Semisonic y Trip Shakespeare, ha abordado la música con una versatilidad extraordinaria.
En una entrevista para nuestra serie Sábados de compositores a cargo de Alyssa Cotsalas con motivo del lanzamiento de su nueva canción, "Dancing On The Moon", nos demostró que, independientemente de la experiencia de cada cual, los artistas y compositores siempre deben lanzarse a lo inesperado y dedicar tiempo a escuchar de verdad. Sigue leyendo para descubrir algunos de sus principales consejos.
Cambia de instrumento Según cuenta, la primera vez que trabajó con Adele, "me enseñó dos ideas, una de las cuales acabo convirtiéndose en '[Rumor Has It](https://open.spotify.com/track/2A73XBDBQgmdXO8VsXPWIs?si=dfba9309d4e24611)'. La otra era el comienzo de '[Someone Like You](https://open.spotify.com/track/1zwMYTA5nlNjZxYrvBB2pV?si=157fc3fe19694691)'... Eran los primeros tres o cuatro versos, y obviamente sabías que iba a ser una canción preciosa. Ella tocaba algo parecido al riff de piano, pero en el bajo", continúa. "Así que intentamos componer a partir de ese bajo y luego Adele cambió a una guitarra e hizo algo similar con ella".
En ese momento dijo: "'¿Por qué no intentas tocar algo en el piano? Quizá nos inspiremos más con él'... Una vez que nos pasamos a cantar y tocar el piano, todo comenzó a fluir de verdad".
Piérdete para encontrarte
"Hace unos años tuve una reunión muy inspiradora con Liam Gallagher, a quien admiro muchísimo. "Me propuso escribir algunas canciones con él para uno de sus discos y aquello me entusiasmó. En las siguientes dos semanas, se me ocurrieron unas cinco ideas y preparé demos muy rápidas que le envié por correo electrónico". Esas canciones no acabaron formando parte del disco del artista británico, pero sí supusieron un momento de revelación para el propio Dan Wilson. "Tuve una especie de epifanía: me dio la sensación de que sonaban mucho más al grupo Semisonic que cualquier otra composición mía desde hacía una pila de años... Supongo que lo que descubrí fue que la fórmula para componer canciones de Semisonic era imaginar que yo era Liam".
La inspiración para un éxito puede venir de donde menos lo esperas
"Escribí 'Closing Time' en una época en la que estaba todo el rato de gira", cuenta sobre el mayor éxito de Semisonic. "No eran teatros, recintos ni nada parecido. Eran locales pequeños, y siempre había camareros allí que avisaban de la última ronda... Ese rollo. Esa era mi gente, el personal del local; era como si trabajáramos en bares. Me vino literalmente una visión: los camareros y porteros de todo el país iban a usar nuestra canción como cierre de la noche, y me encantaba la idea. Puede sonar extraño, pero sabía que iba a ser un éxito entre el personal de los bares. Se trata de personas que suelen estar más al tanto de las novedades musicales, ¿sabes? Me gustaba la idea de que mi banda entrara en las listas de reproducción que elaboraba el personal de un bar. La verdad es que no pensaba que fuera a gustarle al resto de la gente. Pensé que era casi como un regalo a los míos".
Estudia a fondo para que tus colaboraciones den los resultados soñados
Cuando Dan tuvo la oportunidad de trabajar con Carole King, una de las grandes cantautoras de todos los tiempos, "ella sabía que estaba nervioso", admite. "Estaba deslumbrado... Creo que la veneración que sentía por ella me permitió acudir sin ideas preconcebidas de lo que íbamos a hacer. No había objetivos, solo intentar componer algo realmente fantástico".
Pero cuando puso en práctica todo lo que sabía de la música de Carole King, el proceso se enriqueció muchísimo.
"Sabía cosas sobre ella", explica. "Tenía en la cabeza montones de detallitos e ideas musicales suyas. En un momento dado, toqué una progresión de acordes que es muy Carole King. Ella se dio cuenta enseguida de lo que estaba haciendo y se rio; de hecho, terminamos usando esa progresión porque le iba genial a ese punto de la canción".
Escuchar de verdad no es esperar a hablar
Wilson nos contó que su hija Coco pasó 11 meses en cuidados intensivos y pasó mucho tiempo bastante enferma. "Tiene muchas dificultades auditivas y graves discapacidades para hablar y procesar el discurso verbal. Entiende lo que decimos, pero tarda una eternidad en contestar... Aprendí a no intentar adelantarme o darle opciones. Es una cosa que hace todo el mundo y parece casi una forma de hablar por ti. Si tartamudeas o te muestras alterado, te preguntan: ¿Tienes hambre? ¿Tienes sueño? ¿Estás nervioso? ¿Quieres salir? ¿Estás enfadado? ¿Estás intranquilo? Comienzan a sugerir cosas y casi bloquean la capacidad de hablar del interlocutor. Yo tengo en mi vida a una persona que necesita que la escuchen de una manera especial, y eso me ha enseñado a darles a los demás el tiempo necesario para ordenar sus pensamientos antes de hablar".
Para Wilson, este ejercicio de paciencia afectuosa le ha ayudado mucho en las sesiones de composición y grabación. "Me ayuda porque no siento la necesidad de dirigir y no me siento incómodo si veo que no estamos llegando a ninguna parte. O si la persona se está tomando un momento largo para intentar recomponerse. No me importa esperar. Y creo que eso es lo que me cambió de cara al proceso de colaboración musical".